“Tenemos una oportunidad inédita de hacer lo que sabemos que hay que hacer desde hace 30 años”

Denisse Gelber expone en conversatorio del Colegio de Sociólogos de Uruguay.

La directora de Estudios de SUMMA, Denisse Gelber, participó del conversatorio “Educación y pandemia: apreciaciones y nuevos desafíos”, organizado por el Colegio de Sociólogos de Uruguay.

En su exposición, presentó la situación de América Latina antes de la pandemia, durante la pandemia, y los aprendizajes y nuevos desafíos que se presentan a partir del nuevo escenario en los sistemas educativos de la región. 

“La educación sigue siendo lo más relevante”, dijo y destacó que durante la pandemia se registró una profundización de las desventajas estructurales. “Estamos retrocediendo al menos en 10 años el nivel de desarrollo humano en la región, y los más perjudicados fueron las mujeres; los niños, niñas y adolescentes (con un aumento en sus niveles de exposición a comportamientos de riesgo, abandono escolar, exposición de abusos y violencia, etc.); las personas en situación de vulnerabilidad económica; y los migrantes y refugiados”.  

Luego, la especialista se enfocó en el cierre de establecimientos educativos a partir de la pandemia, subrayando que América Latina fue la región con más días de cierre. Y destacó que “muchos países no estaban preparados para un efecto tan prolongado y así fue como surgieron distintos programas educativos, plataformas en línea y otras medidas”. “Para muchos fue empezar de cero con algo completamente nuevo”, añadió. 

“Según datos de TALIS 2018, menos del 60% de los docentes de secundaria tenían habilidades técnicas o pedagógicas para integrar dispositivos digitales en la instrucción, a lo que se suman disparidades respecto del acceso a computadoras en los hogares”, sostuvo.

Respecto de los efectos de la pandemia en los sistemas educativos de la región, Gelber destacó la falta de formación docente para usar TICs con fines pedagógicos; la reducción de los aprendizajes; la falta de acceso a dispositivos digitales e internet de calidad; el involucramiento familiar que se volvió fundamental; el costeo personal de las y los docentes de planes de internet; y la falta de apoyo socio-emocional a estudiantes y docentes.

“Tenemos una oportunidad inédita porque tenemos diagnósticos de hace 30 años de lo que hay hacer y llegó el momento de hacerlo, no podemos esperar más”, advirtió. “Sabemos que necesitamos la escuela. Necesitamos currículums integrales, una educación centrada en niñas, niños y adolescentes, la consideración del bienestar como parte del aprendizaje y la enseñanza; la incorporación activa de las familias al proceso educativo; y el incremento de recursos económicos y humanos para los establecimientos educativos”, agregó. 

En el cierre, expuso una serie de sugerencias para la investigación como generar evidencia sobre grupos vulnerables, nivelación y reinserción escolar. 

“Tenemos claro qué tenemos que hacer, ahora debemos definir cómo, cuándo y con qué recursos”, dijo.